sábado, 12 de enero de 2008

¿Quién insulta a quién?

Era previsible que se armara la que se armó. Para eso la convocó el maléfico Rouco y para eso asistieron a ella los diabólicos obispos. ¿Alguien cree que la concentración pretendía defender la familia? Yo no. Sinceramente creo que, además de su afán de protagonismo, los objetivos últimos del acto del 30 de diciembre era atacar al gobierno y a una sociedad que definitivamente y gracias a Dios, ha vuelto la espalda a esa iglesia rancia, obsoleta, patética, inquisitorial, católica aunque profundamente anticristiana por antievangélica que representan los monseñores.

Cierto es que asistieron gran cantidad de familias, opusianas y kikas las más, pero más cierto es que la mayoría de familias de España no se sentían para nada representadas en el acto en cuestión.

Cierto es que tuvo algo de litúrgico, rancio como no, pero no menos cierto es que el trasfondo, desde su convocatoria, hasta sus consecuencias pasando, por el desarrollo fue eminentemente político.

Patético ver al monseñor de Valencia decir que la de
mocracia y el estado de derecho está en peligro, ¿qué sabrá él de democracia? ¿qué sabrá él de estado de derecho? La iglesia no es democrática ¿Dónde está la voz de sus fieles? ¿dónde la capacidad de decidir? ¿dónde la posibilidad de participar (sin contar por supuesto la X de la declaración de la renta)? Y por supuesto la Iglesia no es un "estado" de derecho" ya que todo depende de la arbitrariedad de sus dirigentes a cualquier nivel. Delitos sexuales, escondidos, delincuentes sexuales protegidos.

Ahora dicen que el gobierno les insultan, ellos con sus palabras insultaron a los millones de españoles que lejos de comulgar con las ruedas de molino que nos quieren imponer, lo único que queremos hacer es vivir en paz y en libertad, sin que nadie nos diga con quien no podemos acostar o lo que es peor a quien podemos amar.

Ellos son los que insultan en sus documentos, en sus ho
milías, en sus declaraciones. Ellos son los que utilizando lo más sagrado, quieren conseguir lo más pagano y lo más anticristiano el poder por el poder. Y además se jactan de ello.

Ellos son los que nos hacen pensar a mucho que después de 2000 años pocas cosas han cambiado. Pero gracias a Dios y muy a su pesar cada vez somos más adultos y no necesitamos de tutelas morales y muy a pesar suyo cada día somos un poco más lib
res.

No hay comentarios: